Boris Brejcha en Argentina: del showman de la máscara de Venecia al hombre que encuentra paz en su jardín

Boris Brejcha tiene la fórmula para hacernos bailar. Arriba del escenario es un showman que se mueve frenéticamente al ritmo de la música, agita sus brazos con diferentes movimientos envolventes y después de algunas horas frente a la cabina, se saca la máscara que ya es su marca registrada.

Boris pasa sus días entre esa ambivalencia. Con la máscara del carnaval de Venecia se transforma en el frontman de su propia obra magistral donde con un singular repertorio nos da clases de música electrónica mezclando los diferentes géneros y subgéneros que subyacen, y sin la máscara, pasa horas y horas produciendo en la tranquilidad de su estudio.

"Para mí tener el equilibrio adecuado es súper fácil. Toco todos los fines de semana. Los viernes y sábados doy los shows más importantes en las ciudades más grandes y después, cuando regreso a casa, todo es tranquilidad", reflexiona Boris en un mano a mano con Clarín.

"Tengo una casa en medio del bosque en la que no hay vecinos, ni nada y para mí mantener el equilibrio es súper simple, como despertarme por la mañana y tomar mi café, sentarme en el pasto y simplemente no hacer nada", describe el DJ.

Gracias a ese equilibrio entre la paz de su casa y la energía vibrante de sus shows es que puede crear tracks como Gravity. Es de sus canciones más destacadas, que acumula más de 55 millones de reproducciones en Spotify, y la infaltable en cada set de sus conciertos.

El concepto de Brejcha

"El concepto del espectáculo Boris Brejcha in Concert surgió como una unión de todo lo que hago. Cada vez que toco en mis sets como DJ, sólo toco sobre mis propias pistas con mi propia música. En el mismo se ven visuales y algunos efectos de sonido distintivos que creo que hacen al encuentro mucho más íntimo para las personas que vienen a la fiesta, así que es algo súper especial y, por supuesto es algo que hay que verlo una vez en la vida", explica Boris sobre su obra.

Boris Brejcha es el creador del subgénero de High-Tech Minimal, mostrando lo más minimalista del techno con sonidos envolventes que generan una experiencia única. "Es como una mezcla de música trance, música minimalista y música techno", sintetiza.

Boris comenzó produciendo música trance y luego viró al minimal techno. Cuando "se aburrió" -sic- del techno, comenzó a mezclar todo y así, de esa fusión, nació el High-Tech Minimal. "Para mí es sólo música electrónica, pero para la gente es mucho mejor, puedo decir que es un sonido minimalista de alta tecnología".

Su presentación en Buenos Aires

El viernes 8 de diciembre se presentó en Buenos Aires en un doble sold out. A las 21 horas tocó tres horas seguidas en Mandarine Park, y lo acompañó su amiga y DJ Ann Clue, y después fue directo a tocar a Crobar en el denominado "after", que -en este caso- operó como la continuidad de un show que dejó la vara altísima.

Con una camiseta de la Selección Argentina y su máscara, bailó, gritó y pinchó haciendo vibrar a un Mandarine sold out ante 15 mil personas. La sorpresa de la noche fue la aparición en escena de la cantante argentina Malena Narvay, quien le dio voz al track Vienna.

Según detalló Boris a Clarín, el crossover -menos esperado- surgió a raíz de las redes sociales donde el DJ alemán descubrió a Malena cantando en un video de Instagram. Enseguida, él se enamoró de su voz y sin dudarlo le mandó un mensaje privado para contactarla e invitarla a producir un track juntos.

Malena no pudo decir no ante semejante oportunidad y todo siguió su curso hasta que se encontraron personalmente en Viena para grabar el videoclip donde ambos aparecen con las máscaras. La noche se coronó con una Malena feliz en el escenario y un Boris emocionado por el amor y la entrega de su público argentino.