Todavía sigo pensando en la marcha en defensa de la universidad pública y en cómo la educación salva a las personas. Les da herramientas para la vida y conocimientos específicos, les da la posibilidad de decidir, de ser autónomas.

El avance de las mujeres está estrechamente relacionado con el estudio. Y al revés: la información y el conocimiento hacen avanzar a las mujeres, que hoy ya son claramente mayoría en las universidades. Aunque no en todas.

Días atrás entrevisté a Thelma Ferguson. Ella es Directora Global de Diversidad, Equidad e Inclusión y Vicepresidenta de Banca Comercial de JPMorgan Chase, una de las compañías financieras más importantes del mundo.

El concepto de DEI (Diversidad, Equidad e Inclusión) que está en su título ya tiene unos años, y está muy instalado en el mundo empresarial. Ferguson es de Estados Unidos, vive en Nueva York y me pareció interesante hablar con ella ahora. ¿Por qué? Porque desde una multinacional pregona el empoderamiento de mujeres, diversidades y grupos vulnerables, a contramano del avance de grupos extremos que buscan terminar con cualquier intento de equidad en el mundo.

Ferguson fue contundente: "Las empresas de primer nivel entienden que el mundo es progresista. En JPMorgan estamos cien por ciento seguros de eso y muy comprometidos en este sentido, incluso vamos a profundizarlo dando más oportunidades para todos. No vamos a retroceder en diversidad, equidad e inclusión, es un camino que seguiremos construyendo", aseguró.

Hablamos de brecha salarial de género, tareas de cuidado, licencias. Y de la importancia de estudiar carreras del área STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas): "No hay que esperar a que las mujeres busquen trabajo sino que hay que ayudarlas desde pequeñas, empezar desde muy temprano, invertir antes. Y eso tiene que ver con los modelos, con lo que las niñas y adolescentes pueden ver, inspirarse, para que digan 'yo también puedo', y que estudien eso, cosas distintas más allá de los mandatos, que rompan estereotipos".

Te dejo la nota completa acá.

En Argentina las mujeres representan el 70% del estudiantado en la mayoría de las carreras universitarias. Pero con las STEM es al revés: solo llegan a ser el 30%. Nos falta avanzar en ese sentido.

Hablando de progresos y retrocesos, hace poco leí un artículo sobre el concepto de "the triple bottom line ", que dice que las empresas deberían centrarse en tres resultados, no solo en uno, y comprometerse en lo social y ambiental, tanto como en las ganancias económicas. La idea es de 1994, aunque tres décadas después se quiera terminar con todo lo que no sea negocio inmediato y para pocos.

El 60% de las mujeres considera cambiar su trabajo por otro con más flexibilidad

En 2023, por cada 100 hombres ascendidos a directivo, solo 87 mujeres fueron promovidas. El 60% de ellas están considerando dejar sus roles actuales por más flexibilidad laboral. Son conclusiones de ManpowerGroup, una multinacional dedicada a soluciones de capital humano.

Hicieron un informe sobre la situación actual de las mujeres en el mundo laboral y, según los resultados, alrededor de un tercio de las organizaciones afirmó que, aunque se han establecido iniciativas de diversidad, equidad, inclusión y pertenencia, los avances hacia los objetivos han sido lentos o escasos.

En términos de equidad salarial, solo el 52% de las empresas declaró que sus iniciativas están dentro de lo previsto o adelantadas, mientras que la otra mitad está atrasada o no tiene iniciativas establecidas.

El 37% de los empleadores plantean que las políticas de trabajo flexible han sido las más efectivas para asegurar talento diverso; mientras que, para el 65% las nuevas tecnologías les han ayudado a promover una mayor equidad.

El estudio de Manpower confirma que en el campo STEM la representación femenina es menor, situándose en un 43%. Tendencia que se mantiene en los puestos de alta dirección, donde la presencia de mujeres alcanza solo el 42%.

"En un contexto global de escasez de talento, atraer y retener una fuerza laboral diversa pasa a ser un imperativo empresarial, y las mujeres desempeñarán un papel cada vez más importante en el futuro del trabajo", asegura el informe.

Pera asegurar que esa participación se consolide, aconsejan:

• Apoyar el funcionamiento de la diversidad, la equidad, la inclusión y la pertenencia.
• Potenciar la alianza de mujeres: que las más jóvenes vean el camino de quienes han alcanzado el éxito, a través de grupos internos liderados por mujeres de nivel ejecutivo, donde estas ayuden a guiarlas desde el comienzo de sus carreras.
• Ofrecer capacitaciones internas en tecnología.
• Mantener beneficios flexibles: las estructuras y horarios de trabajo rígidos impactan negativamente en las mujeres.

Las mujeres y sus perspectivas únicas: desde Le Wagon, una compañía líder mundial en formación tecnológica inmersiva, se hacen eco de los estudios que revelan una disparidad en el sector "a pesar de tener calificaciones similares, las mujeres tienen menos probabilidades de ser contratadas para roles en Inteligencia Artificial que los hombres". Sin embargo, ellos consideran que "cuando las mujeres están bien representadas en este campo, nos beneficiamos de soluciones más inclusivas, libres de sesgos, innovadoras y efectivas”.

Sin mujeres, baja competitividad: Esta desigualdad no solo limita el desarrollo profesional de las mujeres, sino que también impacta negativamente en la competitividad del país en el mercado global. Un estudio de McKinsey Global Institute estimó que la economía global podría perder hasta 12 billones de dólares para 2025 si no se cierra la brecha de género en el mercado laboral.

Pocas mujeres en empresas tech: En las principales empresas tecnológicas, las mujeres son minoría, rondan el 33% de su fuerza laboral total. Y en puestos de liderazgo no llegan al 30%.

Los mejores consejos: para salvar este faltante de mujeres, los que saben recomiendan empezar desde la infancia, promover la participación de las niñas en las STEM desde la escuela primaria y, al mismo tiempo, visibilizar a las mujeres en el sector tecnológico, porque sus historias sirven de referentes para las niñas.

Como las mujeres siguen siendo las principales encargadas de las tareas de cuidado, también es importante implementar políticas públicas que favorezcan la conciliación de la vida laboral y familiar. Por último, se fomenta la inversión en proyectos liderados por mujeres, aunque no solo por una aspiración de justicia social, también es un buen negocio.

Pensalo. Hasta la próxima.